El de la Moralejapágina 1 / 2
Era se una vez, en un año de antaño, un bosque tropical, en el que solo habitaban aquellas criaturas que hoy en día no existen, que nosotros sepamos, (hadas, duendes, unicornios, dragones, sheks…) excepto insectos, pero a pesar de ello, (de ser mágicos) seguían con la cruel necesidad de alimentarse.
La historia trata de un pequeño duendecillo de seta, que iba buscando su fruta semanal por los árboles con el riesgo de que le pillase un Irísjaro (un pájaro de colores cuya cola puede medir hasta 4 metros y come hadas y duendes, pero al ser tan parecidos a los insectos, muchas veces se confundían y comían mariposas o saltamontes)pero en vez de que vieran al duende, el duende vio a un Irísjaro, pero estaba herido y atrapado entre las ramas, chillando, con la esperanza de que otro Irísjaro pudiese llegar y ayudarle.
Al principio, Dendo, (el duende)desconfió y dio media vuelta pero se compadeció y fue a buscar plantas medicinales, después, con temor y mucho cuidado le puso al pájaro las plantas medicinales en las heridas y viendo que no le atacaba usó un poco de magia y le liberó de las ramas.
--GRACIAS, -- decía el pájaro -- ¿CÓMO PUEDO AGRADECERTE ESTO?
--de nada, -- dijo Dendo --ahora que lo mencionas, necesitaría que me llevases a algún sitio del bosque en el cual encontrar fruta, ¿me llevarías?
--¡CLARO!, SUBE A MI LOMO Y AGÁRRATE, SÉ UN SITIO INCREIBLE.
El Irísjaro voló por encima del bosque y aterrizó en un claro en el que había un peral de peras moradas, un manzano de manzanas azules, melones rojos, albaricoques negros… Todo un lío.
Cogió una fruta de cada árbol y el Irísjaro le llevó al sitio en que este se había quedado atrapado:
--ADIÓS DENDO, NUNCA TE LLEGARÉ A AGRADECER LO SUFICIENTE LO QUE HAS HECHO, GRACIAS OTRA VEZ.
--por mí estamos en paz, adiós, y ten cuidado.
Y con esto cada uno partió en una dirección diferente y nunca más se volvieron a ver.